Después de pedirle a mi cuate que ya no me mande mamadas por e-mail, decidí hacer un breve análisis de este panfleto electrónico. Esta lista expone los principales problemas con esa estúpida carta (nótese que el jueguito hasta en la lógica más elemental):
- Cree que la izquierda es una sola cosa que consiste en dar a los pobres lo que los ricos y la clase media han ganado con su trabajo honrado. No es así: ni siquiera Marx decía que hubiera que repartirlo todo por igual. Eso es una falacia del tipo hombre de paja, atacar la versión caricaturizada de un argumento en vez del argumento en sí.
- Ignora la existencia de las muchas variantes y corrientes de izquierda, desde el anarquismo hasta el socialismo, pasando por la socialdemocracia. Dice que hay que comunicarle la anécdota a los "perredistas", como si el PRD fuera la única forma de izquierda que conoce el genio a quien se le ocurrió la fábula... y como si de verdad fuera un argumento tan demoledor que con eso bastara a cerrarle la boca a los de izquierda.
- Cree que la derecha consiste principalmente en defender ese producto de un trabajo honesto. Quien crea que esa defensa es justa, automáticamente es de derecha. Así que si tienes cualquier posesión que ganaste con trabajo honrado, ya te jodiste: eres de derecha y tienes que apoyar al PAN y a los empresarios ricos sin importar lo que hagan. Eso es una falacia de falso dilema, que plantea dos opciones opuestas como si no hubiera ninguna otra: o reconoces que eres de derecha, o le regalas la mitad de lo que tienes a los pobres.
- Los pobres lo son porque se lo merecen, pues no quieren trabajar y toman el camino fácil, a diferencia de los ricos y la clase media, que deben sus posesiones a un arduo trabajo y sacrificios. Las influencia de las condiciones sociales, económicas, históricas y políticas en la éxito económico de las personal (es decir, lo que hemos aprendido de las ciencias sociales, y estudios como éste) no tienen nada que ver, porque el mundo tal cual es es esencialmente justo y los premios y castigos se han distribuido justamente entre quienes lo merecen. Ésta es una ilusión cognitiva bastante burda llamada hipótesis del mundo justo, la creencia de que las buenas acciones son recompensadas y las malas son castigadas, una estructura de pensamiento que comparten los de esta cadena con quienes creen en el Karma o en la Ley de la Atracción.
- Los conocimientos de los profesores (y de los intelectuales en general) aunque sustentado en bases teóricas, científicas, históricas y filosóficas, no pueden competir contra la sabiduría verdadera y el sentido común del padre de familia trabajador. Uno no necesita de todos esos libros y teorías de las que hablan los intelectuales, que de todos modos "no trabajan de verdad". Ésa es una actitud llamada antiintelectualismo, rasgo asociado a regímenes totalitarios o populistas y a personas ignorantes en general.
- Los programas sociales son "socialistas" y benefician a gente que no se lo merece: o sea a los pobres, quienes no merecen ningún tipo de ayuda por ser flojos y vagos.
- Un joven no puede ser de izquierda, sólo cree serlo porque está pasando por una etapa de idealismo que se le quitará cuando se enfrente con el "mundo real". Eso de la izquierda es sólo para ingenuos y despistados.
- Se vale de una falsa analogía, que presupone que la relación entre escuela, alumno y calificaciones es análoga a la que hay entre gobierno, ciudadanía y riqueza. En realidad no es así: la naturaleza de las relaciones en una escuela y en un Estado son muy distintas. Si el modelo de "distribución equitativa de las calificaciones" parece absurdo es porque lo es. Ahora intente usted imaginar un modelo de "libre mercado de las calificaciones" con un "mínimo de participación de la escuela en la asignación de notas". Tampoco funciona, porque la analogía es falsa.
Nótese que incluso la democracia misma es incluida entre los principios tan ingenuos de la joven estudiante cuando el padre dice que compartir su calificación sería "democrático". Así, este texto invalida la democracia por ser sólo una forma más de darle el trabajo de los honestos a los pobres vagales.
Quizá piensen que estoy analizando demasiado, pero creo que este e-mail refleja la forma de pensar de mucha gente ignorante que lo único que sabe de posturas políticas es que el Peje es de izquierda y como él es "un peligro para México", pues la "buena" debe ser la derecha. La campaña de desprestigio contra la izquierda que entre otras cosas decía que, en caso de que la izquierda llegara al poder, refugiarían familias pobres en las casas de la gente de clase media y que si uno tenía dos autos, le quitarían uno para dárselo a los pobre, (más falacias descaradas, pues).
Esto no es un ataque contra las ideas de derecha, sino contra los derechistas que desinforman al público, como si pensaran que su postura sólo podría triunfar si mantienen al público en la pendeja.
Si tú eres de derecha porque crees que se debe privatizar todas las industrias para el beneficio de todos las naciones o que se debe tener un gobierno autoritario y apegado a los valores tradicionales para evitar el caos ¡enhorabuena! Eso es honesto y significa que estás más o menos enterado sobre qué se trata la cosa. Pero si optas por la "derecha" porque tienes miedo de que la "izquierda" se robe tu televisor para "dárselo a un lacandón", entonces déjame decirte que estás hecho un ignaro. Les recomiendo a todos que se informen bien antes de querer comprometerse con una ideología o quieran destruir la otra.
FIN
Más entradas relacionadas:
2 comentarios:
A mi modo de ver, los fundamentos ideológicos de las derechas no han cambiado desde el siglo 18: 1) hay un grupo (ellos mismos) que, por naturaleza, es superior a todos los demás; 2) por lo tanto ese grupo debe tener el control de la sociedad y los demás deben soportarlo en silencio; 3) por lo tanto todo aquel que esté en contra de eso está en contra de las leyes de la naturaleza y debe ser eliminado; 4) los tres puntos anteriores son verdades evidentes fuera de toda duda que no están sujetas a debate.
Las monarquías ya no son lo que eran, pero el puesto que ocupaban antes los reyes y aristócratas en esa jerarquía social "natural" lo ocupan desde hace tiempo los empresarios multimillonarios. Bezos, Musk, etc. son los nuevos Luis XIV. La économie c'est moi.
Aparte, esa es asimismo la razón por la que los liberalistas económicos son de derecha, por mucho que se les hinche la boca hablando de "libertad" y "anti-autoritarismo" y otros términos que no acuñaron ellos pero que suenan a chévere. Defienden darle el poder ilimitado y el control absoluto a los "naturalmente superiores". Si tu calidad de vida no mejora a pesar de ello, es porque no eras "naturalmente superior" y por lo tanto te lo merecías.
Pues yo creo que estás en lo cierto. Saludos.
Publicar un comentario